martes, 29 de enero de 2013

LA ESCUCHA ATENTA

Escuchar a alguien con una atención sensible es regalarle apertura y delicadeza. Se trata de vaciarse de uno mismo para recibir al otro y hacer posible así un verdadero encuentro.
Hay un modo de escuchar que requiere más que oídos, que implica una entrega amorosa de la persona, poco frecuente en el mundo apresurado de hoy. Esta escucha no usa la atención para llegar a ningún veredicto sino para simplemente mantenerse presente frente al otro, emiténdole una callada señal de apoyo: "estoy aquí, ahora, contigo".
La capacidad de vaciarse y ofrecerse en blanco a los demás tal vez sea un don de las personas compasivas, que permiten que otros lleguen a su corazón. Pero también se puede practicar como una suerte de meditación: basta con dedicar una atención real y sostenida a aquellos a los que decidimos conceder tiempo y afecto, con asistir sin prejuicios a eso que dicen -y a eso otro que quizá no dicen pero que percibimos que quieren decir.
Un silencio valiente invita a decir, o al menos respeta el sentir del interlocutor. Tendido hacia él, es un regalo de respeto e interés. Pero además constituye un privilegio para quien va al encuentro del otro saliendo de su ensimismamiento para quien decide conocer algo distinto a sí mismo.
Yvette Moya-Angeler

martes, 22 de enero de 2013

EL FRUTO DE NUESTRAS ACCIONES

Se trata de darse cuenta de que podemos hacer mucho mal con las palabras y los hechos. Y por eso es enormemente importante ser responsable, y lo que uno hace, quiera o no quiera, toca el mundo.
Podemos herir las emociones de la gente fácilmente en un momento en que estemos ahogados, o ignorantes, o con esa tontería propia del que es un inconsciente o irresponsable. Y eso afecta a los que están muy cerca de nosotros, y puede afectar a todo el mundo. A mí me parece que habría que estar mucho más atentos a aquello que hacemos. Que los actos tienen consecuencias, y que podemos herir con una enorme facilidad. Y lo que hay que hacer por encima de todo es vivir bien con uno mismo y con los demás, y herir y lesionar lo menos posible.
Gaspar Hernandez - el oficio de vivir bien-
"Nadie puede hacer el bien en un espacio de su vida mientras hace daño en otro. La vida es un todo indivisible"
Mahatma Gandhi

lunes, 14 de enero de 2013

APRECIO

El despegue fue preciso y enérgico. Enseguida lo vio surcando el firmamento. De repente tembló un ala y comenzó a inclinarse hacia la izquierda. Desde su posición, no podia controlar el aparato. Sin menguar la gran velocidad que llevaba, iba perdiendo altura . Sin remedio, se iba a estrellar. Arrasó a su paso las cabezas de sus compañeros e hizo, por su cuenta, un aterrizaje forzoso en la mesa del profesor.
-¿Quién ha sido?
Su orgullo papirofléxico le hizo ponerse en pie:
-Yo.



Estar orgullosos de nosotros mismos, eso que se llama autoestima, no es egoísmo, sino simplemente presentar nuestra candidatura a ese estado que llamamos felicidad. Jean-Jacques Rousseau decía que "nadie puede ser feliz si no se aprecia a sí mismo". Creo que es lo que hizo el chico de este cuento:

miércoles, 9 de enero de 2013

VALORAR LO SENCILLO

La sencillez está en la decision interior de usar lo justo para sobrevivir. Es bueno cada día preguntarse qué es lo importante para vivir y ser feliz.Probablemente no tengamos que despojarnos de nada, salvo de los deseos de tener más, de los apetitos imposibles para poder comenzar a disfrutar nuestra realidad en cada momento.La naturaleza es el aula de aprendizaje. Cuando se observa la ética de la sencillez, no hay desperdicios: todos los recursos se valoran.
La sencillez no está en el traje sino en la persona que lo lleva. Es parte de la vida, y esta no se puede buscar ni atrapar, solo vale experimentarla.
La sencillez conbina dulzura y sabiduría, es claridad para la mente, invoca el instinto, la intuición y el discernimiento para crear pensamientos y sentimientos de empatía.
Pablo Saz

jueves, 3 de enero de 2013

OTRO ANILLO MÁS

Hemos dado otra vuelta al Sol, como habitantes de este planeta extraordinario, y volvemos a ocupar una posición parecida en el cosmos. Claro que no somos los mismos.
Hemos vivído cosas y ha transcurrido un ciclo más de nuestro tiempo, entre esas dos puertas misteriosas que son el nacimiento y la muerte. En vida, los árboles forman parte del paisaje. Luego queda su legado de materia orgánica, energía o madera, junto a las semillas que pudieran enraizar.
El pasar de los años es como añadir un anillo a nuestro tronco y de vez en cuando no estaría de más preguntarnos cúal es nuestro legado en los años que vamos dejando atrás.
FELÍZ AÑO NUEVO