domingo, 20 de diciembre de 2015

EL SENTIDO DE LAS PEQUÑAS MARAVILLAS

Descubrir la magia del día a día depende más de nuestra forma de ver las cosas que de lo que sucede a nuestro alrededor. Cada instante encierra un tesoro. A veces tenemos la sensación de que ocurren pocas cosas extraordinarias. Nos fijamos en los grandes acontecimientos -una boda, un largo viaje, el nacimiento de un hijo- y no apreciamos los regalos que, momento a momento, nos ofrece cada jornada. En una de las escenas más recordadas de Alicia en el país de las maravillas, el Sombrerero Loco celebra el “día del no cumpleaños”. Es decir; cada fecha del calendario merece una fiesta. Si tomamos conciencia de ello, estaremos en disposición de celebrar lo cotidiano. Cabalgando a lomos de lo urgente, a menudo nos pasan inadvertidas las pequeñas maravillas que dan sentido a nuestros días. Como reza un proverbio oriental: “Estás aquí de paso, detente a mirar las flores”.
"Francesc Miralles"

domingo, 22 de noviembre de 2015

CONECTA CON LO QUE DESEAS

Túmbate en un lugar tranquilo. Cierra los ojos e imagina que vas avanzando hacia el futuro y cada vez tienes más años, hasta que llegas al día de tu muerte. Imagina que sabes que vas a morir y puedes hacer un evaluación general de tu vida. Observa qué es lo más importante para ti, qué cosas estás contento de haber vivido y qué cosas dan sentido a tu vida en ese momento. Abre los ojos y pon todo esto por escrito. Este ejercicio te ayudará a aislar que´es
lo que da sentido a tu vida según tus valores.
(Rafael Narbona)

lunes, 2 de noviembre de 2015

INTENTAR FLUIR MAS

¿Alguna vez has estado tan absorto en lo que estabas haciendo que has perdido por completo la noción del tiempo? Puede que ni te dieras cuenta de si tenías hambre, te hacía daño la espalda o tenías ganas de ir al lavabo...No importaba nada más. Si alguna vez te has sentido así, has experimentado un estado llamado “flujo”.
Este término, define un estado de ensimismamiento y de concentración intensos en el momento presente. En realidad, podemos fluir en casi todo lo que hacemos, por monótono o aburrido que parezca: esperar el autobús, cambiar un pañal, trabajar en una línea de montaje... Fluir hace que nos enfrasquemos en la vida (en lugar de dejarnos alienar por ella), que disfrutemos con las actividades (en lugar de encontrarlas aburridas), que tengamos la sensación de control en lugar de sentirnos impotentes), y nos hace sentir con un yo fuerte (en lugar de sentirnos indignos). Todos estos factores llenan la vida de significado y le aportan riqueza, intensidad... y felicidad.
¿Como se consigue? El secreto está en la atención. Para fluir, tienes que dirigir toda tu atención a la tarea que tienes entre manos. Si el desafío es escaso, la atención se dispersa. Si el desafío es excesivo y te pones tenso, tu atención se dirige hacia ti y tus limitaciones y tomas conciencia de ti mismo.

domingo, 11 de octubre de 2015

LA LENTITUD COMO ALIADA

La prisa hace como si lo que tenemos entre manos fuera algo sin valor que conviene quitarse de encima. Es como intentar mejorar la vida huyendo de ella y alimenta la idea de que nos perdemos algo.
”El tiempo no es sino la corriente en la que estoy pescando”, escribió Henry David Thoreau. Las prisas impiden disfrutar los instantes de eternidad que podemos crear a lo largo del día.

jueves, 17 de septiembre de 2015

SENTIMIENTOS COMO OLAS

Según la teoría budista, los sentimientos son en parte reacciones del cuerpo a lo que perciben los sentidos. De la misma manera que el nacimiento y la desaparición de células fluye como un río en el cuerpo. Los sentimientos también se mueve, pasan y juegan con los sentidos.
El cuerpo percibe y siente constantemente, pero dado que el cuerpo no es la última realidad, tampoco lo son las emociones. Cuerpo y emociones fluyen acompasados dentro de la consciencia y por tanto, existe la posibilidad de ver cada sentimiento como una entidad, observar su paso como el de una ballena en el océano y su relación con los sentidos como el de un pez con su comida. No es inevitable dejarse llevar por los sentimientos, porque estos no son más que olas, movimientos en el río de la vida. Por el contrario, se puede observar la energía que contienen las emociones que pasan por el cuerpo sin dejarse arrastrar por ella.
Para ello es útil repetirse regularmente, que los sentimientos son como las olas, su influencia sube, baja y pasa, para dar lugar a otro sentimiento. No somos lo que sentimos.
Or Haleluya (profesora de yoga)

viernes, 28 de agosto de 2015

ENSANCHAR EL TIEMPO

Abandonar las prisas intensifica la vivencia de los días.
Tener presente el tiempo está en la naturaleza humana, como en la de animales y plantas. Ayuda a organizarse y prever acontecimientos. Sin embargo, cuando más hemos querido controlarlo y optimizarlo con la ayuda de aparatos, más nos hemos dejado arrastrar por las prisas y desconectado del único tiempo tangible: ese que transcurre ahora mismo y que no hay reloj en el mundo, por preciso que sea, capaz de apresar.
Las vacaciones son la ocasión ideal para recordar lo bien que sienta dejar el reloj a un lado y bajar el ritmo.
Así, cuando se deja de depender del reloj y de horarios impuestos se pude recuperar lo que debiera ser natural y practicar todo el año: permitir que sea el cuerpo el que marque el ritmo. Es un ritmo más lento pero también eficiente. Permite prestar atención a los pequeños detalles, estar de verdad para aquellos que nos rodean y sentir o que aveces queda oculto bajo la espuma de los días. El mismo tiempo de reloj que las prisas acortan se ensancha cuando se cultiva la calma.
Mayra Paterson

lunes, 10 de agosto de 2015

UNA MALETA DE SUEÑOS

Este planeta nuestro se ha vuelto pequeño y previsible, pero a pesar de ello el viaje sigue siendo una de las experiencias más fascinantes y aconsejables. Cambiar de hábitos, de ritmo,de comidas, de referencias éticas, de clima, de músicas, de trasfondo histórico o de idioma es tan saludable que se parece a la felicidad. Y porque fugarse del propio entorno de vez en cuando para renovarse y conocerse mejor es algo necesario y vigorizante.
Jesús Aguado

lunes, 13 de julio de 2015

LA SOLEDAD VACÍA

¿Que diría hoy Anthony Storr, cuando tanta gente establece vínculos a través de todo tipo de redes sociales, multiplica sus relaciones a golpe de clic y expone sus intimidades sin que parezca conveniente guardar algo para la maduración interior? ¿Qué diría de un tiempo en el que la distinción entre estar solo y acompañado se ha vuelto borrosa porque los artilugios nos dejan a disposición permanente de los demás? Vería en ellos seguramente una muestra más de la condición contradictoria del ser humano: un ser único del nacimiento a la muerte y con una capacidad enorme de comunicarse con los demás, pero no ilimitada, porque siempre queda un rescoldo intransferible, y por tanto un ser abocado a una soledad intima, aunque necesitado de compañía para “completarse”, para ser.
Es una contradicción insalvable por mucha tecnológica que pongamos en nuestra vida y por muchas relaciones que establezcamos: nunca llenaremos del todo la soledad existencial que nos caracteriza. De hecho, ese sentimiento de soledad parece haberse multiplicado en paralelo a las posibilidades de comunicación, como si esa capacidad en aumento -que lleva a extender nuestra presencia, aunque sea virtual, a todo el planeta- en vez de redundar en más y mejores relaciones ahondara en el aislamiento.
Ese sentimiento creciente de soledad en medio de la riqueza comunicativa proviene de unas carencias que no se sabe cómo llenar. Es una soledad vacía y por tanto “temida”.
Paco Valero

domingo, 21 de junio de 2015

PROGRESO MATERIAL

El materialismo desenfrenado de nuestras sociedades representan una amenaza para nuestro bienestar psíquico. De la misma manera que existe la contaminación del aire, del agua y de los alimentos que alteran nuestro bienestar físico, también existen contaminaciones sociales que perturban nuestra vida mental.
El materialismo puede definirse así: 1) la posesión, el poder y el estatus social representan los valores más importantes; 2) se valora el tener en lugar del ser, el hacer en lugar del vivir, el mostrar en lugar del saborear; 3) se presenta el consumo como la solución a nuestras necesidades y tensiones.
Luchamos para proteger la vida salvaje, la fauna, la flora... ¿No deberíamos hacer lo mismo por nuestra vida interior? También corre un grave peligro.
Cristophe André

miércoles, 3 de junio de 2015

NATURALEZA DENTRO DE TI

Nos gusta contemplar la belleza del firmamento o en las hojas temblorosas de las copas de los árboles pero cuesta detenerse a contemplarla en le propio cuerpo, acaso porque hay cosas en él, sensaciones o emociones, que no se desean ver o afrontar.
Una mayor conexión con el cuerpo enseña el camino para hacerlo y nos recuerda que la naturaleza también late en nuestro interior.
El cuerpo es la naturaleza que tenemos más a mano. Está ahí, cada minuto y cada segundo de nuestra vida, ofreciéndonos su sabiduría e interiorizando incluso lo que la mente no es capaz de comprender. Pero con frecuencia solo nos acordamos de él cuando algo duele o una analítica dispara las alarmas.
Como en cualquier ecosistema todo en él se halla en busca del equilibrio. No es necesario esperar a que que tense para empezar a escucharlo y aprender de los mensajes. A todas horas el cuerpo no dice qué le sienta bien y qué le sienta mal. Prestarle atención es dar un primer paso para cuidarse y sentirse mejor. También se puede dedicar un tiempo al día a habilitarlo conscientemente y dejarse mecer por sus sensaciones, agradeciéndole su labor y que por unos momentos nos permita dejar de hacer para simplemente ser.
Mayra Paterson

jueves, 14 de mayo de 2015

COMBUSTIBLE PARA LA VIDA

Incluso la soledad impuesta por acontecimientos externos puede ser un trampolín para hallar una salida y elevarnos más allá del presente. Es muchas veces la mejor manera de defenderse y protegerse, como en el duelo, dice Boreau, aunque hoy se aconseje a los que pasan por ese difícil trance que mantengan su actividad, que no paren ni se queden solos, cuando tal vez sería mejor asumirla y adaptarse a ella. La soledad, en ese sentido, según, la psicóloga Ester Cuchholz, es un medio imprescindible para regular y ajustar nuestras vidas y un medio para comprender las necesidades reales que tenemos y cómo satisfacerlas. El tiempo que pasamos a solas, voluntaria y conscientemente, no es nunca un tiempo perdido, sino un alimento, es combustible para la vida.
Hay otras muchas facetas positivas de la soledad. Por ejemplo, un estudio realizado en la universidad norteamericana de Harvard comprobó que formamos los recuerdos más duraderos y precisos cuando estamos solos, porque fijamos más la atención y no funcionamos en modos “multitarea” como con otras personas. Y en otro estudios se halló que la soledad mejora la percepción de las cosas: afina nuestros sentidos.
Pero lo más importante, creo, es lo que dijo el gran humanista francés Michel de Montaigne: en ella encontramos esa “trastienda nuestra” donde fijar nuestra verdadera libertad y donde vivir para nosotros mismos. Solo así, dueños de nosotros mismos. Podemos luego salir plenamente al encuentro de los demás. Solo así podemos evitar caer en la peor forma de soledad: el descontento con uno mismo y la incapacidad de disfrutar de la vida
Paco Valero

jueves, 30 de abril de 2015

EL PUNTO MEDIO

Cuanto más se escucha lo que dicen los expertos y los estudios sobre cómo cuidarse, cómo ser más saludable, más fácil es ver de que siempre hay unas constantes: hacer ejercicio, pero sin pasarse, y saber también cultivar la quietud, comer con moderación, beber con todavía más moderación, dormir bien (aunque no todo el día), reducir el estrés y aprender a mantener la calma cuando las aguas están agitadas, cuidar las relaciones con los demás y saber estar solo... Parece que siempre tiende todo hacia el punto medio. Sentido común, dirán algunos, aunque tan poco común parezca a veces.

viernes, 17 de abril de 2015

CONTROL, CELOS Y WASAPS

Tecleamos unas palabras en la pantalla de nuestro móvil y, en unos segundos, una persona las puede leer aunque esté muy lejos. Pero esta facilidad para comunicarnos trae consigo un peligro, el de querer respuestas inmediatas, y si no nos llegan, imaginar los más oscuros motivos.
Hay que saber que nuestra pareja no tiene por qué contestarnos de inmediato. Quizá tiene otras prioridades en aquel momento y eso no significa que nosotros pasemos a ser secundarios ni mucho menos que ya no nos quiera. Quizá sería recomendable ver estos mensajes como antes veíamos los SMS (que ahora nos parecen prehistóricos. Un mensaje que el otro respondía cuando podía. No tenía por qué contestar al instante y tampoco se terminaba el mundo si no lo hacia. Lo mismo que pasaba con las cartas en un pasado que también parece remoto: no ocurría nada si tardaba uno días o incluso semanas en llegar a casa. !Qué tiempos aquellos¡ La diferencia es que con WhatsApp puede aparecer”la carta” en cualquier momento inesperado, con lo cual nos pasamos el día consultando ansiosamente el teléfono, a ver si por fin llega la felicidad.
Gaspar Hernández

lunes, 6 de abril de 2015

LA CAPACIDAD DE FLUIR

Estar disponible y vivo significa fluir con lo que viene. Esto nos lleva a tener otra percepción del tiempo, a olvidarnos del yo y a experimentar una felicidad mucho más profunda que la simple obtención del placer-como por ejemplo el que brindan la comida o el sexo.
Para que podamos fluir es necesario que haya un equilibrio entre nuestras habilidades y los desafíos a que nos enfrentamos. Es decir, ni tareas demasiado fáciles, que llevan a aburrimiento, ni tareas demasiado complicadas, que provocan estrés.
Si concentramos nuestra energía y atención en planes y objetivos que elegimos y sentimos que vale la pena realizar, llegaremos a disfrutar mucho más de cada momento con lo que hacemos. Se trata, por tanto, de entrenarse a fluir no solo en lo que nos gusta sino también en lo cotidiano y rutinario. “No solo tienes que soportar lo que es necesario, sino que lo has de amar”, manifestó Friedrich Nietzsche.
Cristina Martínez Gómez (psicóloga)

domingo, 22 de marzo de 2015

COMO ACEPTAR LA INCERTIDUMBRE

Y es que al no luchar contra la incertidumbre se pueden percibir mejor sus tesoros escondidos, como la libertad para experimentar y crear algo nuevo. La seguridad proporciona ciertamente comodidad, pero no lleva tanto aprendizaje, puede adolecer de intensidad y generar aburrimiento. En contraste, la incertidumbre puede suministrar un suelo muy fértil donde el alma crezca y evolucione.
A veces la vida plantea retos que traen lecciones ocultas que se saborean mucho después. Ayuda preguntase: ¿Qué puede aprender de este momento? ¿Qué he ganado que no sé apreciar? ¿Qué se está abriendo ante mí que todavía no sé ver?
Por la vulnerabilidad que despierta, invita a una nueva forma de conexión con uno mismo y con la vida. Una conexión más auténtica y en consonancia con lo que se es, más allá de etiquetas y apariencias,que invita a la humildad. Desde este nuevo lugar, las relaciones con los demás se transforman. Se descubren nuevos recursos dentro de uno mismo. La infelicidad no es imprescindible,pero puede propiciar un renacimiento. El caos es una buena nueva si se aprende a contemplarlo con menos miedo y más curiosidad. La curiosidad del héroe que se aventura en mares desconocidos para descubrir nuevas tierras dentro y fuera de sí mismo.
Silva Díez

lunes, 9 de marzo de 2015

EL VALOR DE SER UNO MISMO

Carl G. Jung dijo en una ocasión que nos pasamos la primera parte de la vida intentando agradar a los demás y la segunda intentando agradarnos a nosotros mismos. La afirmación de ese psiquiatra y psicólogo suizo encierra mucha fuerza puesto que pocas cosas causan tanto sufrimiento como desear ser aquello que no somos. Algunas personas sienten rabia al darse cuenta de cómo generan su propio malestar con algo tan sencillo como no estar bien en su propia piel. Querer a toda costa ser como otra persona para sentirse querido tal vez sea la más terrible de las soluciones.
En esta época de teléfonos móviles se dice que existen dos tipos de personas: iPhone y las personas Samsung. Nada es más doloroso que siendo un iPhone, querer ser un Samsung o al revés. El quid de la cuestión radica en ser capaces de vivir nuestra propia vida más allá de las modas o las convenciones. Se trata de un gran reto. Ser uno mismo para disfrutar de la vida es cuestión que requiere valor, porque el héroe es el que descubre su mundo y se entrega a él con corazón.
Victor Amat (psicólogo)

jueves, 26 de febrero de 2015

AGRADECIMIENTO POR LA VIDA

Eckhart Tolle sufrió una depresión que le obligó a trabajarse interiormente y se dio cuenta de la importancia de tomar conciencia de cada momento para no perderse en pensamientos que desvían de la realidad y que provocan sufrimiento. Lo mismo postula Jon Kabat-Zinn, quien ha desarrollado técnicas de mindfulness o atención plena para superar el estrés o abordar con serenidad las situaciones difíciles de la vida. Se trata, en definitiva, de entrenar la mente para que aprenda a estar presente, porque es así como se descubre que en cada vivencia se oculta el misterio de la vida en toda su grandeza, y hasta en lo más aparentemente insignificante se encuentra sentido y un motivo para sentirse agradecido.
Mercedes de la Rosa (profesora de yoga)

domingo, 15 de febrero de 2015

SIMPLICIDAD VOLUNTARIA

Acumular objetos que no necesitamos o mantener relaciones que no nos llenan solo conduce a una cosa: el vacío existencial.
Vivimos en una sociedad consumista dominada por el materialismo y el supuesto progreso tecnológico que concede excesiva importancia a lo exterior, a la apariencia , frente a lo interior, lo profundo. Nos preocupa más tener que ser. Y ese olvido de las raíces, de nuestra conexión sagrada con lo que nos rodea, ha creado un vacío que tratamos de llenar con una multitud de objetos en su mayor parte inútiles que nos mantienen alejados de nuestra verdadera esencia humana.
Por eso se trata de reflexionar con calma y sin ataduras sobre lo que queremos y no queremos: revisar motivaciones, lazos emocionales con las personas, con los objetos y con los rituales diarios; comprobar si son impuestos por la costumbre, por el qué dirán, por automatismos... o si realmente los saboreamos, si son rituales que nos hacen crecer interiormente, relaciones verdaderas con nuestro entorno.
Una vez hemos identificado esas prioridades, la pregunta es: ¿Qué aspectos de nuestras vidas están conectados con esa lista? Es muy probable que muy pocas o ninguna de las actividades que hacemos a diario, y a las que dedicamos grandes dosis de tiempo y esfuerzo, estén relacionadas con aquello que realmente nos interesa, nos mueve o nos emociona.
Hace falta determinación y un poco de organización pero también ir con cuidado para no quedar atrapados en una rigidez que nos esclavice más de lo que ya estábamos.
Jesús García Blanca.

sábado, 7 de febrero de 2015

DOMAR AL TIGRE INTERIOR

Todos llevamos dentro un tigre. Lo podemos denominar rabia, ira, enfado... Es un tigre que salta cuando menos lo esperamos. A menudo lo hace saltar otro tigre, con lo cual en estas líneas tenemos que hablar de lo que nos da rabia y de la rabia de los otros, porque las dos suelen estar interceptadas.
No se trata de buscar culpables, porque entonces la ira crece como un fuego al que echamos leña.
Se trata de reconocerla, ya que en ese instante empieza a calmarse. Tomamos conciencia de que es una emoción transitoria, como todas, como todo; y desde nuestro centro, actuamos. No desde la superficie. No entrando en el juego de lo que nos ha dicho o hecho el otro. Nos han lanzado una pelota y nosotros podemos agarrarla o no.
Gaspar Hernández

lunes, 26 de enero de 2015

UN CAMINO PERSONAL

Cuando un periodista le preguntó al Dalái Lama qué le sorprende más, él respondió: “El hombre. Porque vive como si no fuera a morir y muere como si no hubiera vivido”.
Podemos vivir sin darnos cuenta de lo importante o lo esencial, acaso culpabilizando a la sociedad, los grupos de poder, la educación, la tecnología, Internet... y llegar a la vejez enfadados, doloridos, rígidos, frustrados, quejosos.
Eso coexiste con la tendencia a buscar el sentido de la vida, el crecimiento personal o la espiritualidad mediante todo tipo de experiencias. Vivimos en una explosión de ideas, conocimientos e informaciones, a menudo polarizados entre el malestar y la satisfacción. Cada persona debe discernir el camino más auténtico para ella.
WEN-HSIU HU WEN

miércoles, 14 de enero de 2015

SER UNO MISMO

Es cierto que la vida no solo la vivimos, también la pensamos. Con frecuencia escuchamos a personas de 70 o de 80 años decir que, a pesar de que saben qué edad tienen, por dentro siguen sintiéndose como aquellos jóvenes veinteañeros que fueron. La vida no solo la vivimos, también la pensamos. Y para darle un sentido importante, es necesario ser conscientes del tramo de vida que transitamos, darnos cuenta de que en cada tramo las energías cambian como también los proyectos, los deseos, los objetivos, los valores. Hay un momento para “comernos” la vida y otro para ir más ligero. Lo importante es caminar cada tramo siendo honesto. Y sabiendo quién eres, apartando la cobardía que te impide darle a la vida lo que tienes para darle. A veces es una cuestión de aceptar los propios límites. Y eso suele costar mucho de asumir.
Jorge Garriga (terapeuta)

sábado, 3 de enero de 2015

CELEBRAR LA VIDA

Cada día es igual y distinto a los demás. Dura las mismas horas, pero lo que en él sucede es irrepetible y valioso. Hay días especiales -regalos del destino o consecuencia de nuestro esfuerzo- que brillan con luz propia: a veces algo tan extraordinario como el nacimiento de un hijo, o simplemente un instante feliz en el lugar más insospechado.
Pero junto a lo imprevisto, hay días especiales marcados en el calendario que, generalmente en modo colectivo, nos invitan a tener determinada actitud. Son las fiestas.
Todas las culturas, desde la más remota antigüedad, tienen sus días festivos. En primer lugar están las celebraciones de carácter sagrado, de las que derivan la mayoría de las fiestas tradicionales. De la misma manera que un templo supone delimitar un espacio que tendrá un significado especial, la fiesta supone un palacio construido en el tiempo.
Otra de las características de la fiesta es que no se trabaja. El trabajo, necesario para muchos fines, ha sido visto por el ser humano como una especia de castigo. De manera que lo importante entonces es recuperar el valor del juego, de lo lúdico en el sentido de no tener otra finalidad que el hecho mismo de producirse. Volver, de alguna manera, a la espontaneidad del niño.
Se trata, en definitiva, de celebrar en el interior de cada uno, y en el grupo del que se forma parte, los aspectos más importantes de la vida, como son la alegría, el amor o la esperanza.
Daniel Bonet